Hemoparásitos de las aves del orden passeriformes en clima frío, en condiciones de cautiverio
Introducción
Colombia ha sido favorecida con la presencia de una gran cantidad y variedad de flora y fauna. Las aves de vistosos plumaje y cantos exóticos, además del fácil transporte, han sido víctimas del tráfico ilegal, destrucción del hábitat o introducción de especies no habituales que alteran el equilibrio natural.
El transporte de los animales en pésimas condiciones, sin comida por algunos días, cambios de las dietas naturales por alimentos que el hombre "piensa " son los adecuados, pichones que son separados de sus madres a muy temprana edad, mutilaciones y la condena a una vida de cautiverio hace que los animales se inmunodepriman y presenten síntomas de enfermedades que en su vida libre posiblemente no hubiesen sufrido. Una de las principales entidades capaces de patogenizarse son los hemoparásitos, constante fuente de interés para los parasitologos desde que Danilewsky en 1885, describió por primera vez el Trypanosoma avium de muchas aves del occidente de Rusia ( Nandi, NC. 1994). El interés por estos parásitos fue incrementado a finales de siglo cuando Ross (1898) descubrió el ciclo de vida y transmisión de Plasmodium en pollos.
Desde tiempos de Danlewsky, unos 500 artículos concernientes a parásitos de las aves han aparecido impresos. Muchos de esos artículos son informes, listando los parásitos de la sangre de la avifauna de regiones específicas del mundo (Samour, J. 2000). Muchas de estas listas han sido restringidas a resumir los hospedadores de un grupo específico de parásitos de la sangre a saber: Los Haemoproteidae, Leucocytozoidae, Babesiidae y Plasmodiidae (Levine, N. & Campbell, R. 1971, Desser, S. & Bennet, G.F. 1993). En el orden Passeriformes han sido reportadas, en diferentes partes del mundo, especies de Trypanosomas en las familias Corvidae, Fringillidae, Hirundinidae y Mimidae (Levine, N. 1961; Marinkelle, C:J: et al 1976).
Las altas parasitemias no son muy comunes, pero esto no es evidencia para indicar que alguna especie sea patógena ((Levine, N. 1961). En un estudio realizado en un total de 315 aves representantes de 75 especies (23 familias) en Villavicencio y San Miguel (Meta) se encontró un total de 0,9% infectado con Trypanosoma (Rodriguez, O.& Matta N. 2001). Los géneros Plasmodium, Leucocytozoon, Aegyptianella y Haemoproteus descritos, han sido encontrados en las familias Corvidae, Thraupidae, Turdidae; Fringillidae, Hirundinidae, Icteridae, Mimidae y Strigidae (Levine, N. 1961; Bennett, G.F. et.al 1982; Hsu, C-K. et al 1973).
Los síntomas de los hemoparásitos, como Plasmodium, pueden incluir fiebre, anemia, hipoxia, erizamiento de las plumas e hinchazón en párpados (Cordero del Campiño, M. 1999; Soulsby, E.J.L.1987). En el caso de los Haemoproteus están bien adaptados a sus hospedadores vertebrados y, consecuentemente, muchos de ellos se creen poco patógenos, aunque se han descrito anemia, disnea, edema pulmonar, hipertrofia hepática y esplénica y lesiones de la molleja (Cordero del Campiño, M. 1999). Este trabajo determina los hemoparásitos de mayor presencia en aves del Orden Passeriformes que se encuentran en el Centro de Recepción y Rehabilitación de Fauna Silvestre del DAMA en Bogotá.